Aranceles es la palabra de moda, todos los medios hablan y con motivos. La administración Trump está amenazando a sus aliados históricos de imponer aranceles a los productos europeos. La Unión Europea tendrá que saber adaptarse en la nueva guerra comercial. Así, en el Cafè Europa de marzo hemos estudiado las posibles razones, efectos y reacciones del Viejo Continente y el mundo.

Para entenderlo todo, de manera clara y completa, hemos contado con la presencia de Patrícia García-Durán, profesora de la Universitat de Barcelona, investigadora del Observatorio de Política Exterior Europea del Instituto de Estudios Internacionales de Barcelona (IBEI) máster en Integración Europea y doctora en Gobierno por la London School of Economics; y Berta Pérez Pey, directora de Internacionalización y Proyectos Europeos en la Cámara de Comercio de Barcelona.

Primero, García-Durán ha indicado que Donald Trump utiliza los aranceles en términos no comerciales con la voluntad de transmitir un mensaje de poder porque, según su presidente: “los Estados Unidos ha sido maltratado con los aranceles no recíprocos de Europa”. García-Durán ha señalado también que estas amenazas pueden ser una manera de negociar cesiones económicas que Europa no aceptará.

Pérez ha analizado, poniendo sobre la mesa datos, las diferencias entre la batalla arancelaria de Trump durante su primer mandato y el actual. “La guerra comercial del primer gobierno Trump incentivó la apertura de nuevos mercados sobre todo en el Japón y América Latina por parte de las empresas catalanas”, ha dicho Berta Pérez.

Pérez también ha explicado qué países y sectores podrían ser los más afectados actualmente. La portavoz de la Cámara de Barcelona ha remachado sobre la situación presente del comercio catalán en relación con los EE. UU., hasta cuando los aranceles pueden reducir anualmente el PIB de Cataluña y las opciones que tienen las empresas para afrontarlo.

Otra idea clave ha sido cuánto de preparada está la UE para aguantar esta agresividad. A pesar de que Pérez Pey cree que en Bruselas le falta fortaleza, García-Durán expresa su convicción que Europa se ha estado preparando muy bien y sabrá responder. García-Durán ha afirmado que: “la UE no se doblará porque en el ámbito del comercio somos una sola voz y somos fuertes”.

También, en respuesta a la pregunta de la Dolors Camats sobre el efecto que puede tener la ciudadanía en esto, García-Durán fue clara: “seremos más pobres durante unos años”, y Pérez además sumó el problema de la apreciación del dólar y el boicot de los compradores.